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Este amor se quedó sin metáforas. Eso debe significar que este amor se fue al tacho, al diablo, al suelo, al fondo del mar, a un pozo ciego, por un bolsillo roto, atrás de cualquier carro lleno de cartones...bueno, no sé. Ya pasó cerca de un año, más o menos, apróximadamente o por ahí. Ya pasó todo lo que tenía que pasar : nada. Porque en definitiva ,el amor no tiene que ser siempre una serie de hechos que confeccionan la vida amorosa de un par de seres (que en general son dos) También puede ser la nada más impune que te arrastre de las narices, por ahí, sólo para ver si hay algo; hasta que un día de sol, después de cuatro de lluvia, descubrís que no hay ni una metáfora que le ponga cualquier figura a este pie de elefante que se te para sobre el pecho cuando te despertás.
Ya está todo dicho, porque era tan poco lo que había para decir, que con dos o tres silencios alcanzó para todo. En cuanto a las palabras, bueno, las palabras somos nosotros mismos : los que comemos , andamos en bicicleta y apagamos la luz. Las palabras somos nosotros mismos, amor… amor que se quedó sin canciones; y he ahí la parte más triste. Nunca usé un “he ahí” y creo que este momento es oportuno porque cuando en el tema de las canciones reside el problema, es que hablamos de un problema grande. Cuándo un amor se queda sin canciones es que ha sido arrasado por una aplanadora. Es como si el mundo se quedara sin arte : la muerte misma, yo diría. Un amor que se quedó sin música ha muerto y aunque pese como pie de elefante sobre el pecho, no hay marcha atrás.
No quiero pensar más en ese amor del que ya ni recuerdo el nombre, que tuvo todos los apodos posibles y se despersonalizó como nadie, se redujo a objeto, se volvió ceniza.
Ese amor que fue color rojo, todo rojo, en mente y alma rojo; ya no se acerca a ningún color y, de última, que importa el color que alcance : un amor es rojo o no es

JP

"EL ROJO ESTA EN LA MENTE"


http://www.youtube.com/watch?v=C7Zsb0Y8Tpg